Documentos de trabajo
La ciudad de El Alto, en el altiplano de Bolivia, es vulnerable al cambio climático debido a la disminución de los recursos hídricos en la región y sus limitaciones socioeconómicas, fiscales y de gobernanza. La extensión de El Alto se podría duplicar para el año 2050 si continúa con la tendencia de desarrollo urbano exhibida hasta el presente. Las agencias nacionales e internacionales están ampliando la infraestructura para el suministro de agua, pero no se ha atendido la vulnerabilidad financiera de la ciudad y de la empresa prestadora del servicio de agua para ampliar la red de distribución. Los residentes periurbanos, incluyendo los migrantes desplazados por la sequía rural y los residentes urbanos que dependen exclusivamente del aprovisionamiento de agua por tuberías, correrán el riesgo de escasez y contaminación del agua, y aumentos inesperados en las tarifas. A pesar de que la relación entre la sequía y el ordenamiento territorial urbano no está bien estudiada, este caso sugiere que el manejo del crecimiento urbano debe jugar un papel importante en la adaptación climática en las zonas áridas. Además de la oferta de infraestructura, los esfuerzos de adaptación en el sector hídrico deberían desarrollar la capacidad institucional de El Alto para manejar el crecimiento urbano y promover la resiliencia frente a la sequía por parte de la comunidad.
Palabras clave: adaptación al cambio climático, vulnerabilidad, planificación urbana, gestión de agua, altiplano, Andes, Bolivia, modelos hídricos, WEAP